1 MINUTO DAN 3 PUNTOS...

Una victoria sufrida, como no, así serán todas esta temporada y ya lo dijimos antes de que empezara a rodar la pelota en Soria la semana pasada. Un equipo con ganas y lleno de calidad en los pies tiene que sufrir evidentemente la falta de experiencia de muchos de los jugadores, una experiencia que esperemos se compense como hasta ahora con las ganas y el esfuerzo físico que les está llevando a ser superiores a sus rivales, visto esta la fortaleza del equipo durante todo el partido, algo difícil a estas alturas de temporada.

Si la grada chilla, por lo general tiene razón en todo, también cuando lo hace contra la parte noble del campo, lo que se suele distinguir como “palco” y es que el pueblo es sabio, ya se dice desde la antigüedad y seguramente por gentes más sabias que las que os escriben.

D. Villa presencio desde un palco VIP el Sporting-Ponferradina

Si analizamos el partido de hoy por etapas, deberíamos separar y tal vez dejar en el olvido los primeros 45 minutos que dieron mucho que pensar de esta nueva hornada en la que el Sporting y sobre todo el sportinguismo ha puesto su ilusión para el futuro, un equipo de jóvenes procedentes en la gran mayoría de esa escuela de fútbol que tantos y tan buenos jugadores ha dado y de los que hoy teníamos prueba en uno de los palcos del templo gijonés, David Villa junto a su padre y amigos, presenció el partido y compartió en los momentos del descanso, una vez descubierto por el respetable el aluvión de peticiones de fotografías que le hicieron los más cercanos,  entre los que afortunadamente nos encontrábamos para ofreceros la imagen en primer término del internacional asturiano que festejo los goles del Sporting de forma contenida pero con la alegría reflejada en su rostro.

Cuellar, hace la parada del partido

Pues dejando esta primera mitad en un apartado de juego gris sin apenas oportunidades salvo un par de jugadas de Guerrero y Jony que no llegaron siquiera a inquietar la meta berciana pero que al ser lo más destacado del partido en esa etapa levantaban al público de los asientos. También debemos mencionar en estos minutos de la primera parte las intervenciones no demasiadas pero si claras de Cuellar, a destacar un mano a mano con el delantero berciano que en la esquina del área pequeña lanzó un imponente trallazo que el merítense aguanto a pecho descubierto como los grandes toreros esperan a las puertas de chiqueros y desde allí impertérrito “Pichu” desvió el balón que por norma general debería haber sido el 0-1 en el electrónico, algo de lo que en otras circunstancias pasadas y esperemos que olvidadas este equipo era acostumbrado a llevar de lastre.

Bernardo, sin duda, el MEJOR

Empezó la segunda mitad de forma radicalmente diferente, parece que ahora el técnico si usa los intermedios de los partidos para arengar a los futbolistas e indicarles que y como deben de hacerse las cosas en el terreno de juego, seguramente con alguna que otra voz dedicada en el día de hoy al único que creemos formalmente que no estuvo acertado en casi ninguna de las acciones en las que intervino, el bueno de Alex Menéndez hoy no tuvo su día y luego lo analizaremos individualmente. Por otra parte una zaga mejorando cada día más con este lapsus comentado del lateral izdo. pero con dos centrales soberbios uno por encima del otro y viceversa el “jefecillo” Bernardo el “subalterno” Luis Hdez, el primero un valladar tanto por alto como a ras de suelo, el segundo cubre a la perfección los huecos del primero y crece partido a partido, además se permite rematar o sacar de banda provocando auténtico peligro, en fin mejoría absoluta, completa este cuarteto Lora, que sin estar perfectamente también se le ve progresar y da por momentos recuerdos de aquella estimable campaña que realizó con el equipo en primera y que estuvo a punto de que lo fichara uno de los grandes del fútbol español.  Y con la confianza en un portero que empieza la temporada pletórico y con unos ánimos indiscutibles, el centro de campo en su línea habitual con un Sergio que ha mejorado del encuentro anterior y un Cases que pese a no estar bien es el jugador que ve y reparte el juego en el equipo, sabemos que con todos los detractores de este gijonés es difícil hacerles ver la claridad de visión de juego de Cases, pero algún día como ocurrió con otros jugadores importantes en la historia sportinguista se le reconocerá su clase y su importancia en el Sporting en estos momentos. Apoyando a estos dos medios se encuentra un Barrera, lejano del que empezó la temporada pasada pero que esperamos tener pronto, si no se  nos marcha que todo puede ocurrir, en las condiciones máximas para rendir a la perfección con dos extremos como Carmona que todos sabemos la clase que atesoran sus piernas y la rapidez y desfachatez del cangues Jony, una lanza por el lateral y un sprint imposible para los laterales, todos estos conducen al hombre gol, pese a que no arque, pero el trabajo en punta de Guerrero, otro que seguramente muchos vean parado, sin sangre, corriendo sin sentido, pero siempre atento e incordiando a la defensa rival.

Esa segunda mitad completamente diferente a los primeros 45 minutos con un Sporting lanzado y con verticalidad a la portería de la Ponferradina, algo que no se había visto en ningún momento de la primera mitad, en esto vimos oportunidades de gol bastante claras y seguidas, recordamos principalmente en lanzamiento de falta de Jony que con una ejecución impecable iba directamente a la escuadra del guardameta Dinu que voló literalmente para sacar una mano el balón a córner cuando El Molinón se levantaba para festejar el tanto que no llegó. 

Marca Carmona el 0-2 y todos felicitan el origen, Jony

En este tiempo el árbitro, que no se había visto hasta ese momento, dejó sin sancionar una falta clarísima de Andy de forma disciplinaria puesto que le hubiera costado la expulsión por doble amonestación, algo que empezó a provocar diferentes protestas entre los jugadores de ambos bandos. Seguidamente en el 59 llega el primer tanto rojiblanco, tras un saque de esquina le llega el balón a Bernardo en segunda jugada que de forma poco ortodoxa consigue rematar para que el balón pegue en la rodilla de Sergio y se cuele en la portería berciana, era el 1-0 y el Molinón estallaba, soltando adrenalina y esa tensión acumulada por la incertidumbre. No dio tiempo a mucho para que una sensacional jugada por banda del cohete cangues,  Jony,  que deja atrás su par y en vez de irse al fondo con lo que amaga coloca el balón al segundo palo a media altura para que llegue sobre la marca Carmona y sin que el balón toque el césped lo aloje en el fondo de la red ante la pasividad del portero que no tiene tiempo a reaccionar, 2-0 en el marcador el Templo eufórico y el equipo jugando a placer con esa técnica de la que tienen en cantidad estos jugadores.

El técnico de la Ponferradina agotaba sus cambios mientras que Abelardo hacía el primero dando entrada a Muñiz por un agotado Jony, después Pablo Pérez y Jara serían los sustitutos de Barrera y Carmona, en esta ocasión los cambios no dieron el mismo resultado que la semana pasada en tierras numantinas pero sirvieron para refrescar el equipo e incluso poder  haber aumentado la diferencia, algo que no ocurrió y que en cambio sí fue acortada por parte del equipo de Ponferrada tras el saque de una falta desde el lateral izdo. en el que el balón toca en Alex Menéndez y desvía su trayectoria para dejar descolocado a Cuellar, ligeramente adelantado, y no poder evitar el tanto, era el 2-1 y aun tiempo por delante, pese a ello el equipo no se desmembró en absoluto y con esa defensa contundente de la que hemos referido anteriormente y un centro de campo sólido siguió en la lucha con alguna oportunidad incluso que más difícil resulta fallar que haberla introducido en la meta del rival. En este tiempo un córner a favor del equipo visitante llega al segundo palo y se ve claramente como una vez más el hoy mal protagonista Alex Menéndez toca con el brazo sin que el árbitro o sus auxiliares lo vean o al menos eso pensamos porque de haberlo visto no habría habido la menor duda de que era penalty. La grada lo vio y respiro, acostumbrados a ser siempre perjudicados, una vez a favor tampoco debemos de renegarla, aunque es honrado reconocer que la falta existió. 

Cuellar, Luis Hedz., Guerrero, Barrera, Sergio, Bernardo,  Lora, Cases, Jony, Carmona y Alex menéndez

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

En definitiva un partido en el que el resultado fue justo, pese a esta jugada comentada del penalty no señalado, dada la intensidad que puso el equipo local y que una vez más demostró que pueden más los hombres que los nombres, mientras tanto en parís “el chepu” sigue deshojando la margarita mientras pasa el tiempo y deberá decidirse pronto porque mañana a las 24,00 horas se termina el plazo y o ficha por el Celtic u otro que surja si así sucede o debería incorporarse al Sporting, algo que si bien como aficionados tal vez agradeciéramos, otros no lo verían con buenos ojos y podría significar más daño para el equipo que bienestar.

Por parte de la Ponferradina poco tiene que ver con el equipo que vimos las dos pasadas campañas y que tan difícil nos ponía los partidos, llegando a vencernos incluso en nuestro campo. El cambio de técnico que sus motivos tendrán como siempre todos los equipos, no le ha beneficiado en absoluto al equipo berciano que por otro lado ha visto como varios jugadores importantes abandonaban su disciplina y que todavía no puede tener a pleno rendimiento a alguno de sus incorporados más necesarios a estas alturas de temporada. El caso de Pablo Infante, que incluso pido la excedencia en su trabajo (es el Director de una entidad bancaria en Miranda de Ebro) al tener que abandonar el Mirandés debido al descenso de este, que ahora no se ha efectuado por el caso Murcia, le ha descentrado bastante y se ve que no es ni la mitad del delantero que vimos en el lateral con la camisola del equipo burgalés. Además de la falta de su guardameta teóricamente titular y varios más al igual que la forma de jugar, hacen de este equipo que siempre destaco por su apego al balón y la presión sufra demasiado sobre todo cuando no tiene la pelota, base principal de su forma de juego.

Hoy pese a que marco un tanto, con suerte y que no le dieron un penalti, realmente no mereció puntuar en El Molinón frente a un equipo el gijonés lleno de juventud y ganas de agradar.

SPORTING: Cuellar; Lora, Luis Hernández, Bernardo, Álex Menéndez; Sergio Álvarez, Nacho Cases; Carmona (Santi Jara, 88′), Álex Barrera (Pablo Pérez, 75’), Jony (Juan Muñiz, 70’); Guerrero.

PONFERRADINA: Dinu; Carpio, Alberto Aguilar (Lucas, 57’), Alan Baró, Camille; Acorán, Andy (Rueda, 62’) , Jonathan, Pablo Infante; Berrocal (Sobrino, 67’) y Yuri.

GOLES: 1-0, min 60: Bernardo; 2-0, min 61: Carmona; 2-1, min 72: Álex Menéndez, en propia puerta.

ÁRBITRO: Figueroa Vázquez (C. Andaluz). Mostró tarjeta amarilla a Alan Baró, Lucas y Andy por los visitantes.

INCIDENCIAS: El Molinón. 15.637 espectadores. Algún conato de protestas al palco en diferentes momentos del partido y al finalizar.

ssdg